domingo, 14 de junio de 2009

Dos años en Venezuela



Hoy se cumple mi segundo año de emigrante. Esa palabra nunca me gustó porque me parecía demasiado fuerte verme en esa condición. Como todo cubano, cuando tuve edad adulta lo único que pensaba era en cómo irme del país, para los nacidos en esa isla nada es fácil.

Hacía dos años que trataba de salir: primero fue la carta de liberación que no me la daban porque trabajaba en el Centro de Estudios sobre Asia y Oceanía, luego porque trabajaba en el ESTI (Equipo de Servicio de Traducción e Interpretación, del Consejo de Estado, eso nunca se dice). Durante dos años fue solo un juego decir que me iba del país, además lo utilizaba para amenazar a mi suegra cuando ponía las reglas en su casa.

Pero el destino está escrito. Un buen día fui a buscar la visa y me la dieron tan fácilmente que salí saltando de alegría hacia la calle 16 buscando 5ta y mostrándole a mi esposa el papel que me daba la libertad. Ese momento cambió mi vida: ya sabía que alguien en el mundo confiaba en mí y que creía en lo que yo decía. Sin embargo, sabía perfectamente que no regresaría aunque me pegara todo lo que le pega al que abandona su identidad.

Mis amigos me hicieron comidas en sus casas. Me dieron abrazos y susurraban que no me tomara la Coca Cola del Olvido (eso quiere decir que los recuerde siempre). Me pidieron las ropas que estuvieran buenas y cualquier cosa que les pudiera hacer la vida mejor. Yo no creía aún que me había llegado el momento ¿soñado?

El día 15 de junio me levanté temprano, fui a casa de mi primo, no parecía que en unas horas iba a recibir la mejor oportunidad de mi vida. Llegué a la casa, me bañé, no sé si me di un trago de Havana Club, recogí todas mis pertenencias y dejé, casi en forma de testamento, todas las cosas mías que debían repartirse.

Mi suegro se ofreció a llevarme al aeropuerto en su viejo “Bausar”. En el camino veía las cosas que estaba seguro ya no vería más: un hombre caminando por una calle, una cola en una shoping, un policía dirigiendo el tránsito, un cartel que decía Viva Fidel… pero era mi entorno, mi cultura, era yo…

Al llegar al aeropuerto nos tomamos las cervezas de la despedida (Bucanero), nos hicimos las fotos correspondientes un abrazo y pasar por la ventanilla donde solo queda un gesto de adiós…



Pero ese no fue el final…, ahí empezó mi última odisea en Cuba: se me había olvidado el comprobante del permiso de salida. Un papel que dan en inmigración que dice que puedes salir. ¿Y ahora cómo hacemos? Era el último vuelo de Aeropostal a Venezuela y por suerte venía retrasado. Mi esposa tomó las riendas debido a su experiencia en aeropuertos después de tres viajes a España, buscó al representante de Aeropostal y le preguntó si me daba tiempo ir a la casa a buscar el comprobante. El señor dijo que sí porque el vuelo venía con una hora de retraso.

Salí en un taxi, que cobraba 50 USD. Eso no estaba previsto. Salimos casi volando y hasta nos agarró un aguacero. El chofer casi no podía avanzar. Así llegamos al Reparto Bahía. Eché todo abajo en el cuarto y al fin encontré el comprobante.

Salimos corriendo. El taxista volaba literalmente entre la lluvia y las llamadas al celular me impacientaban mucho más. Llegamos a tiempo al aeropuerto, casi esperaban por mí. Entré, le di un beso a “la pucha” y me vi en el avión sentado.

Luego de media hora volando el avión regresó a la Habana porque tenía un desperfecto técnico…

Por suerte solo fueron minutos en la Habana, luego agarró vuelo y me sentaron en tres puestos porque ya mi puesto lo habían vendido y buscaban donde ubicarme. Me senté al lado de un señor de Barbados que solo hablaba inglés y luego de dos horas y media de vuelo y dentro de un ataque de alegría llegué a Venezuela. Cuando el avión se detuvo y pusieron un túnel para bajarse, salí corriendo literalmente gritando “Soyyyyy liiiiiibreeee abajoooo Fideeeeelll” la gente creería que estaba loco. Pero era mi sueño decir eso desde hacía mucho tiempo.

Hoy estoy aquí, a solo dos años de aquel día, cuántos amigos nuevos, cuántos proyectos, cuánta nostalgia por los que quedaron. Gracias a Dios tengo a mi esposa conmigo, Venezuela no es lo que dicen las noticias, y yo, soy más hijo del mundo que de un pedazo de tierra.

domingo, 31 de mayo de 2009

Llamamiento al gobierno cubano y al mundo



Pedimos a todas las personas e instituciones defensoras de los derechos civiles en el mundo que contribuyan, y llamamos al gobierno cubano a:

-Liberar a los presos políticos en Cuba
-Levantar las prohibiciones que impiden a los cubanos entrar (a) y salir de su país
-Levantar las prohibiciones de acceso a Internet para los cubanos.


Bookmark and Share

viernes, 15 de mayo de 2009

Aquiles reporta desde Guantánamo Cuba: ¿Podré decir un día que no estoy de acuerdo? El caso de ETECSA



Es costumbre en Cuba antes de hacer cualquier cambio, el gobierno comienza una serie de rumores. Estos cambios pueden ser medidas o quitando personalidades del gobierno.

Las medidas generalmente son malas o sirven de alguna manera a aligerar temporalmente la vida ya hostigada de los cubanos, las medidas que pudieran catalogarse como buenas están enfocadas a que los cubanos vean algo nuevo antes de hechos que le interesen al gobierno como son elecciones, actos públicos importantes y cosas por el estilo, estas nuevas medidas pueden ser desde dos jabones hasta que digan que van a vender un refrigerador con muy mala calidad a créditos, que cuesta alrededor de 13 veces el salario medio de un trabajador cubano, y lo va a tener endeudado por al menos 3 o 4 años descontándole cuotas del 8 % del salario.

Sean malas noticias o temporalmente buenas, como se mencionó, vienen precedidas por rumores, para que los cubanos sepan lo que viene y que no tienen derecho a oponerse, en caso de cambio de personalidades si es una persona que tuvo ideas divididas con el “coma-andante”, siempre los rumores divulgados están dirigidos a presentarlos como personas deshonestas, homosexuales, ladrones y descalificativos personales, en los casos de mala administración y mal cumplimiento de sus funciones, lo ponen en otro cargo que generalmente es más alto, como se dice en Cuba "lo quitaron para arriba". Pero en ningún caso hay manifestaciones, ni huelgas, ni siquiera una mano levantada en una reunión en contra de lo que se va a poner.

En el caso que te voy a presentar es de los trabajadores de ETECSA(Empresa de telecomunicaciones de Cuba), el monopolio de las comunicaciones en la Mayor de las Antillas, hace ya unos meses se soltó el rumor "van a cambiar el modo de pago en ETECSA, por uno que estimule la producción", ya los cubanos saben que no deben de esperar un cambio que estimule la producción realmente, sino aplastar más a los que tienen un poquito más de posibilidad, se debe recordar que los cubanos deben vivir de las migajas que quiera dar un gobernante.

Después de varios meses de espera, ya no era rumor ya era algo real que se estaba discutiendo y como siempre por gusto, ya que la administración al final hace lo que bien les parece, guiados evidentemente por el gobierno y nadie dice nada.

Llegó el cambio de modo de pago, de momento quitaron un 10 % de la estimulación en pesos cubanos que se percibía en ese momento (era el 40% ahora es hasta un 30%, pero es mucho más complejo que esto), pero no todo quedó ahí, resulta que se cumplieron los planes de ingresos, gastos, completamiento de llamadas, pero hay un indicador que depende de la cantidad de personas en la empresa y desgraciadamente ETECSA tiene más de 17000 trabajadores, una plantilla inflada para tener gran cantidad de personas sin hacer nada, o sencillamente llevando la burocracia de este país.

El resultado es que este mes la empresa no cumplió con dicho indicador y no tendrá el 30 % restante, estamos hablando de alrededor de un 40 % menos de salario de un mes a otro.

Ahora te hago mi pregunta nortedebrujula, ¿es que las personas están de acuerdo con esta medida?, ¿o están de acuerdo en recibir 40 % de salario menos?, ¿por qué nadie dice nada ni siquiera en una reunión?, todo se comenta en los pasillos y cuidándose unos de otros.

Lamentablemente el gobierno del coma-andante ha destruido nuestra sociedad y nuestro país al extremo que ni siquiera se puede hablar. Es algo triste y no por el salario de los trabajadores de ETECSA, sino porque ni siquiera se puede decir lo que uno piensa. Lo que exijo sencillamente es poder decir: "NO ESTOY DE ACUERDO"


Bookmark and Share

Aquiles nos reporta desde Guantánamo, Cuba: El bloqueo de afuera o el de adentro



"(…) aquí en medio de algo de frustración, mía y de los que trabajan conmigo, te escribo esto. Es de tarde y no tenemos deseos de trabajar."

Hace ya unos días que oímos sobre la posibilidad de suavizar el embargo de Estados Unidos contra Cuba, era evidente la posición del gobierno cubano, sobre todo, la de los más aferrados a hacerlo según las viejas costumbres.

Muchas personas que ya tienen cierta madurez sobre el entorno político de la isla, se dieron cuenta de que si no había embargo, no había más política de Cuba contra Estados Unidos. Muchos dieron su opinión sobre la necesidad que tenía el “coma-andante” de que siga el bloqueo, para mantener su retórica frente a Estados Unidos. Luego en una reflexión (que había prometido que serían menos cada día y que por cierto no ha cumplido), tildó de tontos a aquellos que pensaban que Cuba necesitaba el bloqueo para continuar con su política contra el supuesto enemigo. Pero no solo la necesita para continuar con su política con el país del norte, sino que es necesaria para justificar todo lo malo del socialismo, la ineficiencia, hipocresía, apatía, el robo, la burocracia, por solo nombrar algunos, ya que no tendrían ya su oscuro origen "El bloqueo". Podemos encontrar en los mercados cubanos arroz de Estados Unidos, en las empresas estatales autos Ford, camiones International, equipos de climatización Carrier, pollos de Estados Unidos.

Lo que se puede ver es una especie de guerra santa, una cruzada política contra Estados Unidos, en una ocasión el “coma-andante” antes del triunfo de la revolución que encabezó, comentaba que había venido al mundo para tener por enemigo a Estados Unidos y que toda su vida estaría enfocada a ese fin, en otra ocasión cuando estaba en la Sierra Maestra al ver unas bombas que el ejercito de Batista había comprado a Estados Unidos, declaraba que Estados Unidos se las pagaría por venderle las bombas a Batista. Lo peor de este tema es que ha involucrado a todo un pueblo en su lucha personal, llevándolo a la miseria y la desesperación que existe en este país. Todo parece indicar que esta lucha loca acabará solamente con su muerte.

Es de esperar nuevas medidas del gobierno cubano, cuyos hilos los dirige el “coma-andante”, y estarán encaminadas a que su dominio sobre el país no mengüe en lo más mínimo, es de esperar como ya lo anunció hace algún tiempo, que los cubanos que residan en el extranjero no puedan entrar en Cuba si no cumplen con estrictos requisitos que él pondrá, y es algo irónico los cubanos no pueden entrar en la Cuba de Fidel. Otra medida extrema y que podría enfriar otra vez los avances dado por el gobierno de Obama es provocar temores de enfrentamientos directos con Estados Unidos, lo que le daría un año o dos hasta que inventen otra cosa o algún republicano llegue al poner. De manera que no importa lo que haga Obama por un lado, el lo compensará por el otro para siga la miseria en su isla de esta manera los cubanos estarían muy preocupados para mirar un poco más lejos.

Como dije más arriba mi impresión es que la confrontación de Cuba con Estados Unidos solo acabará cuando acabe la guerra personal del “coma-andante” con su enemigo invisible.

Nos vemos.


Bookmark and Share

sábado, 2 de mayo de 2009

Mucho en común



Un día, cuando aún vivía en Cuba, una amiga vino a Venezuela y al regresar, yo, que ya tenía muy en secreto planes de venir hacia este país, le pregunté qué le parecía y me dijo que a mi me gustaría. Al preguntarle por qué, me dijo que porque era oriental, y esas montañas y el valle de Caracas no me iban a parecer nada extraño.

Teniendo en cuenta que años atrás había emigrado hacia la Habana desde Guantánamo -mi ciudad natal que tanto quiero- en busca de urbanización y desarrollo social- me sentí un poco desestimulado. Cuando uno está en Cuba y cierra los ojos imaginando hacia donde quiere ir, nunca le pasa por la mente algo que se asemeje a su realidad.

Pero sobre el comentario de mi amiga, creo que no estuvo equivocada. Aquí en Venezuela he encontrado verdaderos amigos, muy parecidos a mis amigos santiagueros y guantanameros. Hay un paisaje que, a pesar de no ser el mismo de Cuba, me recuerda mucho a mi zona oriental: grandes montañas, extensas playas al pie de esos macizos montañosos, como sucede en mi adorada Baracoa.

La vegetación tupida del cerro El Ávila, que no me canso de admirar cada vez que voy de regreso a casa, y cuyas imponentes montañas se yerguen como resguardo del urbanismo caraqueño, me recuerda a la Sierra Maestra, al Pico Turquino y a la zona de Bartolomé Masó en Bayamo.

Creo que nací aquí, no mucho ha cambiado en mi entorno, por eso a veces me encuentro criticando con vehemencia las cosas que suceden, cual si fuera un venezolano más, tratando de que las cosas le vayan mejor a este país, y es que los venezolanos en su idiosincrasia me lo han permitido, porque el afecto de ellos por los buenos extranjeros es tan grande que le ofrecen lo mejor de su tierra: ese es su sentido de la identidad.

Decir que viviré aquí para siempre no es algo que se pueda asegurar, pero el que haya encontrado puertas abiertas, amigos de verdad, una familia muy parecida a la que dejé en Cuba, nadie lo podrá negar jamás. Al igual que nunca olvidaré mi paso por estas tierras, donde quizás tenga un ancestro en común con cualquiera de mis “panas”.

domingo, 5 de abril de 2009

Los zapatos primos



Nunca había reparado en lo parecidos que podían ser dos zapatos que no pertenecieran al mismo par. Los zapatos de los cuales les hablaré eran muy parecidos y llegaron a mí en condiciones muy difíciles también. Los miraba y volvía a mirar hasta convencerme de que eran iguales. Pero ¿Cómo llegaron a mí?

Todo comenzó con mi hermano Jc en el año 1995. El se encontraba pasando el Pre-militar cuando no recuerdo por qué se quedó sin zapatos. Mi papá para tratar de resolverle lo llevó a su casa para hacer una requisa entre las cosas que había dejado el abuelo de su nueva esposa, fallecido hacía unos días.

No encontraron muchas cosas entre los trastes dejados por el viejo de 90 años, quién sabe cuándo fue la última vez que usó zapatos, en definitiva. De todos modos, para resolver y lograr que ese fin de semana volviera a sus estudios para obtener la “orden 18”, para continuar estudios universitarios, le dio dos zapatos muy parecidos y nadie reparó que eran de un modelo similar pero nunca iguales.

Una vez mi hermano en casa, nos mostró el buen calzado. En verdad se veían muy buenos y fuertes pero alguien al mirarlos bien se dio cuenta de que no eran iguales. ¡Ahí comenzaron las burlas! A todo el que llegaba a la casa le enseñábamos a ver si era capaz de reconocer “las siete diferencias” (como la sección de Bohemia) en los diferentes zapatos.

Avergonzado mi hermano, nunca los llevó a la escuela. Creo que alguien apareció con un par de “botas rusas” y resolvió el problema ahí mismo. Pero los zapatos siguieron esperando por un necesitado, convencidos de que en esos años tan difíciles era seguro que aparecería alguien quien les diera buen uso.

Por esa época yo cursaba mi cuarto año en la Universidad de Oriente. Una noche, muy cansado y agotado, quizás por el hambre, me acosté a dormir como a las ocho de la noche y dejé la puerta entre abierta para que cuando llegaran los compañeros de cuarto no me despertaran. Creo que escuchaba “Nocturno” en mi radio VEF 221, cuando me desperté y fui a ver mi equipaje que estaba preparado para salir desde la universidad hacia Guantánamo al día siguiente.

Para mi sorpresa, no estaba mi maletín, ni la ropa que tenía lista para salir el siguiente día. ¡Qué desgracia! ¡Me había quedado sin zapatos! ¡Justo una semana después que mi hermano! ¿Y ahora cómo regresaba a mi casa? Y peor ¿Qué me ponía para regresar el domingo? Mierda: ¡regresé a la casa en chancletas (cholas)! ¡Qué pena! En plena terminal de calle 4, en Santiago de Cuba, yo en chancletas.

Llegué a mi casa y todos con asombro comentaban sobre la gran pérdida de los zapatos, como si hubiera muerto alguien, pero nadie podía ayudar, porque todos estaban como yo: con un solo par de zapatos. ¿Pero cómo resolví? Sí, eran precisamente los zapatos primos los que me esperaban. Yo sí no tuve inconveniente en usarlos. Los vi fuertes, “bien parecidos”, negros con una costura alrededor, solo que uno era más largo que otro.

Pero hay gentes muy observadoras, más cuando estás en la universidad. Ese fin de semana me fui con mis “zapatos primos”. Agarré el camión desde el parque de San Gregorio, en Guantánamo, nadie notó nada. Era de noche. Llegué a la universidad y no pasó nada porque era de noche y en el cuarto no había mucha claridad para reparar en eso. En el aula no hubo problemas porque metí los pies bien para atrás del pupitre o la mesa para dos que compartía con Miguel, otro igual que yo.

Solo fue en la tarde, al momento de ir al comedor, que empezaba a las 5:05 P.M y creo que desde las 4:00 estaba allí. En el camino, un colega un año escolar mayor que yo, nombrado José Ramón Reborido, que se fue cuando los balseros y aún no sé donde está, pero tenía buena vista y observancia y me dijo: ¡Negüe, pero esos zapatos no son iguales! ¡Hubiese querido que me tragara la tierra! ¿Por qué tuvo que darse cuenta? ¿por qué fue tan observador? ¿Por qué yo?

Llegué al cuarto, empaqué mis cosas y salí para Guantánamo. Era miércoles. No me importaban las inasistencias, sino la pena de haber usado dos zapatos que no eran iguales ante tantas personas inquisidoras, quizás con sus traumas también por haber tenido que usar la prenda de vestir menos adecuada en plena adolescencia.

domingo, 29 de marzo de 2009

Así fueron unos años de estudio



Corría el año 1993, la universidad estaba en "candela", eran los años en que literalmente te daban 4 caramelos y una espumadera de arroz como almuerzo en la Universidad de Oriente. Ir caminando por el pasillo alterno, aquel que pasaba por la parte de afuera de los edificios de derecho, contabilidad y bilogía, era todo un ritual: los estudiantes íbamos con algún potecito (cantina) para llevarnos la mala comida y mejorarla en el cuarto donde teníamos cocinas eléctricas para esos menesteres.

Las tías (nombre con el que se llaman a las señoras que despachan la comida en esos comedores) te daban algo menos de la ración porque tenían que llevar algo para sus casas, la cosa estaba negra para todos. Recuerdo a la “china” sacándome de la fila diciendo su frase inquicidora: “mira el de la camisa de cuadro está repitiendooo” y ahí mismo se te echaba por tierra el único arroz con sabor a pescao que ibas a tener. Habría que ir con Magaly en la cafetería por el té sin azúcar que te salvaba de los jugos gástricos.

Una vez en el cuarto, en la beca, toda clase de sazón podía sentirse en los cuartos más decentes. Sí, esos eran en los que había una mujer, a veces de 19 años, que mejoraba la comida con algunas cebollas, ajos y pimientos. Aún puedo sentir el aroma de esa comida ligada con el hediondo olor que emanaba de los inodoros que teníamos bien cerca.

Pero la vida iba. Estudiábamos, bebíamos alcohol de farmacia, nos preparábamos para un seminario o una clase con un profesor que era una eminencia pero sufría la misma pena del hambre que yo. Tratábamos de llegar a casa después de una semana en el infierno, montados en camiones tan llenos de gentes que si levantabas el pie podrías quedarte sin sitio para volver a ponerlo. Así nos hicimos profesionales, nadie nos evaluó esa asignatura. Solo unos pocos estuvieron consciente de lo que pasaba y nos tendieron una mano para que luego en el futuro pudiéramos recuperar el tiempo dedicado a la sobrevivencia.

lunes, 16 de febrero de 2009

La suerte está echada



Venezuela: Muros y vallas que te hacen recordar que estás en un país capitalista pero que vive una triste confrontación política. Por momentos pasaban carros con altoparlantes que estimulaban el voto por el SÍ a la enmienda constitucional, o en cualquier esquina te encontrabas a los opositores entregando a los transeúntes trípticos a favor del NO. El país se ha dividido: un día fue la gran marcha de la oposición, otro día fue la de los chavistas, y pueblo contra pueblo se dirán ofensas y se odiarán.

Venezuela vive un momento crucial en su historia. Una vez más se sometió a consideración popular el destino de la democracia. Tal consulta se había realizado a finales del año 2007, conjuntamente con otras modificaciones a la Constitución, donde la propuesta fue rechazada popularmente.

La reelección indefinida es una de las formas que ha encontrado el Presidente para ejecutar su proyecto socialista, proyecto obsoleto y fracasado, que hasta ahora solo ha traído confusión y desorden. Pero es precisamente esa la piedra angular para dominar los mecanismos hasta ahora democráticos. Ello me hace recordar a mi Cuba y su ex presidente, quien haciendo uso de una forma de democracia muy extraña solo una grave enfermedad lo pudo sacar del poder.

Fidel Castro fue el Primer secretario del Partido Comunista de Cuba, Presidente de los consejos de Estado y de Ministros y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Cuántos poderes en una sola persona. Cuántos modos de jugar a la democracia, donde quien escribe, nunca, en 38 años, ha tenido la oportunidad de votar por su presidente.

Ya alguien ha dicho que nadie escarmienta por cabeza ajena. Amo al pueblo venezolano tengo un amigo chavista y otro “escuálido" (opositor) y a ambos les digo que no permitan que el odio mande en esta sociedad porque la verdad es que le costará mucho recuperarse, y mientras, ellos solo serán víctimas del tiempo perdido. Terminen con el juego político, vean y estudien los ejemplos que tienen bien cerca, luchen por ser cultos, porque parafraseando a José Martí, será la única forma de ser libres.

domingo, 15 de febrero de 2009

Ganó el Sí



Sin palabras por ahora.

¿Sí o No?


A pocas horas para que se anuncien los resultados del referendum:

5:45 p.m Guardias Nacionales con armas largas chequeando el tráfico. No se que pasará pero los nervios se alteran a medida que llegan los momentos finales.

6:09 p.m Se declara el cierre de la votaciones.

6:40 p.m Declaraciones de líderes estudiantiles y opositores. Hay gran espectativa porque haya ganado el NO.

6:45 p.m Extraoficialmente la gente comenta que en el Estado Vargas ganó el Sí.

7:04 p.m Desde el Zulia se anuncia histórico niveles de participación en el referendum.

7:09 p.m Liberan a estudiantes, de la universidad católica Andrés Bello, quienes habian sido apresados por presuntos hechos de falsificación de documentos. Aún se desconoce si los documentos eran falsos.

7:30 p.m Tarek William Saab, gobernador del Estado de Anzoátegui aclara el error que ocurrió, mientras ejercia el voto, en la máquina donde le salió un voto en blanco, rompió el papel y volvió a votar. Repudia las imágenes publicadas por Globovisión donde lo mostraba a él con su hijo en el momento del voto. (Por ese mismo error a varias personas se les anuló el voto y no pudieron repetirlo como lo hizo el gobernador).

8:40 p.m Hay optimismo en los dos bandos. ¿¡todos celebran?!

9:35 p.m Primer parte oficial: Gana el Sí 54 %. Hubo 70 % de participación y alrededor de 6 millones de abstenciones.

jueves, 29 de enero de 2009

¡Cambio Ya!



El pasado 1 de enero de 2009 se cumplieron cincuenta años de régimen castrista. Un aniversario cerrado que no debería ser motivo de celebración para quienes defendemos los derechos humanos y las libertades políticas fundamentales.
A lo largo del último medio siglo, los cubanos hemos conocido un solo gobierno, un solo partido, un solo discurso oficial. Más del 10 por ciento de la población de la isla ha marchado al exilio huyendo de la falta de oportunidades, la represión a la diferencia y la sinrazón de un país gobernado por Fidel Castro —y ahora por su hermano Raúl— con mano férrea y dogmatismo militante.
El cincuentenario de la Revolución cubana no debe ser, por tanto, motivo de festejo.
Al contrario, se trata de una magnífica ocasión para mostrar nuestra solidaridad hacia todo el pueblo de Cuba, que merece poder decidir su propio destino, gozar de libertades de asociación y expresión, manifestar su derecho a disentir y dar rienda suelta a la iniciativa empresarial de sus ciudadanos sin temer la represión de un estado policial.
Mediante este comunicado, un grupo de exiliados cubanos en Cataluña invita a una manifestación reivindicativa y pacífica ante las puertas del Consulado de Cuba en Barcelona (Paseo de Gracia, 34) el próximo domingo 1 de febrero, a las 12.00 hrs.
Los ciudadanos amantes de la libertad no debemos permanecer impasibles ante un régimen que se ufana de su inmovilidad y desprecia todos los llamados a impulsar una transición hacia la democracia.

Tomado de: http://www.penultimosdias.com/2009/01/27/convocatoria-a-manifestacion-en-barcelona/

Por si fuera poco en el diario Granma, periódico oficial del gobierno de Cuba, pusieron una bandera cubana sin estrella. Algún día se sabrá si fue accidentalmente u otra forma más de protesta.

http://www.penultimosdias.com/2009/01/29/escandalo-en-el-periodico-granma/#comments

Para los que muchas veces me han preguntado sobre qué hacemos los cubanos para liberarse del yugo de la dictadura, estas son solo algunas de las formas de lucha.

domingo, 25 de enero de 2009

En lo que se convirtió la esperanza


Imagen tomada por una manifestante

Durante el tiempo vivido en Venezuela una de las cosas que más he hecho ha sido tratar de entender al venezolano, su historia, sus luchas. Ya he dicho que el ser cubano y vivir aquí te ofrece un amplio espectro sobre los diferentes sectores de la población porque la mayoría de las veces te confunden con los cubanos de “misión”, otras al saber que no tienes nada que ver con el gobierno entonces sienten lo que ya habíamos experimentado los cubanos cuando veíamos a un chileno en Cuba escapado de Pinochet –cuánta historia detrás de esa persona.

Lo anterior me ha permitido intercambiar, sin ocultar nada, con chavistas y opositores. He conversado durante largas horas, como mismo hacíamos en Cuba, sobre el destino de este país. La verdad es que en estos momentos el venezolano vive un proceso con características singulares porque durante un buen tiempo siempre su democracia fue más de lo mismo. Por ello creo que ambos sectores buscan igual fin social.

En ese punto se puede hablar de la gran pobreza que ha sacudido al pueblo venezolano a pesar de la riqueza natural que abunda en este país. Diríamos de la falta de oportunidad, que de manera general, ha acompañado a este pueblo, imagínense que en un momento oscuro de su historia hasta las universidades fueron cerradas. El mismo pueblo, ya cansado de todo ello decide un cambio y ve en Hugo Chávez esa oportunidad.

Era un militar: es necesario decir que el pueblo venezolano tuvo un dictador militar de apellido Pérez Jiménez, a quien por increíble que parezca, recuerda con agrado porque hizo muchas obras sociales y no permitió los niveles de inseguridad e insatisfacción que hoy sufre el país. A Pérez Jiménez sencillamente no le agradaban las ideas de izquierda.

El joven Chávez: salido de una clase social humilde, con promesas de cambio social y crítico de las dictaduras (golpista por demás). Tenia un discurso diferente al de los políticos tradicionales. Sencillamente, era el agente de cambio, incluso para la clase pudiente que detestaba los altos niveles de corrupción a los que ya el país estaba sometido.

Con esos detalles, tan breves, en el año 1999 el presidente Chávez llega a la presidencia con la mayor cantidad de votos nunca antes registrada en la historia de Venezuela. Muchas personas, hoy incluso sus más terribles opositores, votaron y confiaron en el proyecto de cambio que traía para la sociedad. Hay una famosa entrevista donde abiertamente detesta todo lo que al final hizo, entre ello la descalificación de la dictadura cubana.

Hoy, luego de diez años de mandato de Chávez, con múltiples fracasos legislativos, políticos, sociales y no se cuántos más, muchos venezolanos están inmerso en otro proceso y es el de quitarse a tiempo lo que podría ser la decadencia cívica de un pueblo, que a diferencia de Cuba, siempre ha elegido democráticamente a sus presidentes, ha protestado y tomado las calles cuando se ha sentido humillado o ultrajado.

La oposición lucha contra la división que ha sembrado el gobierno actual (quien no se una al proyecto actual no es venezolano, no es el pueblo y se saben de todos los descalificativos que le da a aquellos que piensan diferente, me recuerda a los escorias cubanos (pitiyankis en Venezuela) y gusanos en Cuba(escualidos de aquí). La oposición lucha por mantener sus derechos cívicos y se ha organizado desde el año antes pasado al decirle NO a la enmienda a la Constitución. Antes era solo un intento de poder.

Los chavistas, por su parte, temen que vuelva a ser como en el pasado, en que otros partidos tengan el poder y seguir excluidos. Muchos desaprueban también la reelección indefinida del presidente. Yo creo que sueñan con un Chávez democrático(cosa que ya no será posible con él una vez que logre su objetivo).

Un pueblo que ha sido tan libre en su individualidad y en su capacidad de escoger no creo que se deje engañar y despojar de sus derechos básicos. Confío en los estudiantes y en la capacidad de discernir entre lo más conveniente. Y que aprovechen las experiencias de los que venimos marcados por la palabra (que no mencionaré) que les quieren imponer sin consultar con la historia y su cultura.

sábado, 24 de enero de 2009

La solución biológica



Hace mucho tiempo en Cuba alguien me comentaba sobre las alternativas que tenía la isla para ser libre en un futuro, después de varias posibilidades, el orador terminó diciendo que, si ninguna de las hipótesis planteadas era posible, habría que esperar la solución biológica para tantos años de faltas de libertades y aislamiento.

Por estos días, el presidente de Venezuela en una de sus más largas intervenciones por televisión anunció que ya no veríamos más a Fidel (la verdad es que después de las dudas apareció su clon, el doble o su espanto). Todos pensamos que si el vocero oficial de Fidel decía eso, ya que nunca se han referido a la salud de este último con pesimismo, entonces no habría dudas de que le había llegado la solución biológica a Cuba.

Pero no tan rápido, días más tarde al ver la “metedura de pata” que había dado, quiso rectificar su discurso (una práctica muy usual en él, a quien le falta el dispositivo analizador entre el cerebro y la lengua) diciendo que Fidel está “vivito y coleando”.

De todos modos, para una parte de los cubanos que viven en la isla es indiferente cualquier cosa que pase. Saben que no importa que sea Fidel o Raúl mientras sus problemas sigan siendo los mismos desde hace medio siglo, lo que corrobora la tesis de que no son unos gobernantes sino todo un sistema diabólico el que debe morir con su inventor.

Otros cubanos fuera de la isla celebraremos (el día que sea) por lo que hemos esperado desde hace mucho. No la muerte de una persona, sino la desaparición total del juego de aquel, que por diferentes medios logró seguidores a través de la desinformación y el aislamiento total de los habitantes de la pequeña Cuba.

De cualquier forma, la solución biológica, a pesar de ser solo una posibilidad, quizás sea la oportunidad para comenzar los cambios y liberar a la mayor de las antillas de la gran cárcel física y sicológica que han vivido sus habitantes durante cincuenta años.

domingo, 4 de enero de 2009

El hombre nuevo cincuenta años después



Cualquiera que utilice un buscador de internet para encontrar noticias sobre Cuba notará cuántas giran en torno al triunfo de 1959. Al igual que muchos, no perderé la ocasión de opinar sobre el proceso social o histórico más trascendental que ha vivido la isla y del cual soy partícipe o víctima, si se quiere.

Cuando nací, ya la Revolución de Fidel tenía doce años, no quedaban vestigios de la otra Cuba, se había declarado el carácter socialista, había pasado la crisis de los misiles, habían muerto el Ché y Camilo Cienfuegos, había ocurrido el éxodo masivo por Camarioca, ya existía la libreta de racionamiento de alimentos y la de la industria ligera, ya no se celebraba la Navidad y se había censurado a los Beatles…

Sin embargo, aún no habían muerto los miles de cubanos en la guerra de Angola, tampoco habían ocurrido el éxodo masivo por el Mariel ni la crisis de los balseros, en 1994. Seguí el juicio de Ochoa y el colapso del campo socialista, repetí consignas revolucionarias con vehemencia, fui a marchas de repudio al imperialismo y a los “gusanos”, a trabajos voluntarios, aprendí ruso (porque era el idioma de la colonia), tuve juguetes una vez al año hasta la edad de 10, vi dos canales de televisión (solo una hora de muñequitos o comiquitas rusos) y me leí no más de tres periódicos, todos medios oficiales del gobierno.

Definitivamente, estaba diseñado para ser el hombre nuevo que tanto hablaban los líderes de esa revolución. Yo y mis contemporáneos somos ese hombre nuevo, que como otros cubanos, tuvo como única opción el exilio y dejar atrás a su familia, amigos e identidad. Soy de los que no tuvieron libertad de expresión.



El hombre nuevo que aún vive en Cuba ha perdido la esperanza, no le importa si el presidente es Raúl o Fidel, porque ya no cree en más promesas, les hicieron el cuento a sus padres y ahora se lo tratan de hacer a ellos. Vive una inercia esperando las migajas resultado del chantaje político: si no vas a las marchas, a los círculos de estudio políticos de la sección sindical, a los trabajos voluntarios… no hay viaje al exterior, ni estímulos sindicales y estás condenado a la eterna soledad por no ser confiable.

Siente desarraigo en su propio país, le han hecho creer que por no ser revolucionario es un apátrida, un lumpen o un gusano y lo mejor que hace es irse a otro país, por eso se lanza al mar en un intento suicida tratando de llegar a un sueño. Que por trabajar por cuenta propia, es reconocido como vago ante los sistemas de vigilancia “revolucionaria”.

No conoce de tarjeta de débito, de cajeros automáticos, cómo rellenar un cheque, de transferencias bancarias, ni de tarjetas de crédito para comprarse un carro o una casa.

Es lamentable ver a los cubanos que llegan de misión a otros países cómo dejan de comer, de tomarse un café, por ahorrar unos centavos del viático asignado, para comprarse un televisor (cualquiera que sea), un dvd, una lavadora o tratar de llevarle un regalito a algún familiar, incluso al jefe, para que vea que lo tuvo presente mientras estuvo afuera. El síndrome de Estocolmo les juega una mala pasada.

Han pasado cincuenta años y a pesar de las creídas razones por las cuales ha sobrevivido el inviable sistema socialista creo que es mayor el daño o deterioro social creado en la isla. ¿Hasta cuándo seguirá el hambre y la desesperación en Cuba, el autobloqueo, el aparthei y las leyes contra el propio cubano?

Para colmo el presidente actual de Cuba dice en su discurso: “No nos hagamos ilusiones, debemos prepararnos para otros 50 años de lucha; lo digo no para asustar a nadie, es la pura realidad”. Todo está dicho, el mensaje del gobierno de Cuba a su pueblo continúa siendo de desesperanza y mucho miedo por la incapacidad de sus envejecidos gobernantes en sus cincuenta años de sobrevivencia.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Aquiles reporta desde Guantánamo


Plaza Mariana Grajales, Guantánamo

Nuestro hombre en Guantánamo, Aquiles, me envía el siguiente correo electrónico, sobrepasando las barreras de las prohibiciones, la censura, la represión. El mensaje lo reproduzco textualmente:

Para que te mantengas informado y no olvides tu ciudad natal, te diré que el municipio Guantánamo "se ganó la honrosa designación" de la sede para la celebración del triunfo de la revolución en toda la provincia (algo es algo, aunque no es mucho… bueno de acuerdo… es casi nada).

De modo que todos los trabajadores fuimos convocados a participar de forma “voluntaria” en tan magna celebración. Aquí te copio el mensaje recibido (que circuló por todos nuestros correos electrónicos) de los camaradas del sindicato de mi empresa donde nos invitan a participar.

TRBAJADORES, LUNES 22 DE DICIEMBRE DE 2008, TODOS A LA PLAZA PEDRO AGUSTIN PEREZ A LAS 3.00 PM, EL MUNICIPIO GUANTANAMO GANÓ LA SEDE POR EL ACTO DE LOS 50 AÑOS DEL TRIUNFO DE LA REVOLUCIÓN, CELEBRAREMOS, HAY SORPRESAS EN LA PLAZA DESPUÉS DEL ACTO. (Me imagino que como siempre Ron y Cerveza de Pipa).

NO DEBE FALTAR NADIE, PASAREMOS ASISTENCIA EN LA PLAZA POR SECCIÓN SINDICAL, CADA SECRETARIO DE SECCIÓN SINDICAL ENTREGARÁ AL BURO SINDICAL LA ASISTENCIA, EL QUE NO ESTÉ SE LE DESCONTARÁ EL TIEMPO DE TRABAJO.

ESPERAMOS QUE TODOS ASISTAMOS, ¡TODO POR LA REVOLUCION! NOS VEMOS.

BURO SINDICAL.

Hasta aquí llegó el “estimulante” mensaje pero aún sin parecer suficiente tal amenaza, un cromañón manda la siguiente aclaración:

ELOISA POR ESTA RAZÓN SE TRABAJARÁ NADA MÁS MEDIA SECCIÓN Y LA OTRA SECCIÓN ES EN LA PLAZA, SE CONTEMPLARÁ COMO LA OTRA SECCIÓN DE TRABAJO, DONDE LOS JEFES ADMINISTRATIVOS SON LOS MÁXIMOS RESPONSABLES DE LA ASISTENCIA DE SUS SUBORDINADOS, ES UNA INTENSIÓN DEL PARTIDO EN EL MUNICIPIO CONGREGAR MÁS DE 100 000 GUANTANAMEROS POR SER EL 50 ANIVERSARIO DEL TRIUNFO DE LA REVOLUCIÓN.

Una vez en la Plaza fue como siempre: llegas, te ven, tu los ve, todos nos vemos y cada cual coge su rumbo. Nos concentramos en la calle Máximo Gómez y ya en la calle Calixto García (a solo dos cuadras) había abortado la marcha, y siempre por el camino de regreso a mi casa vi a muchos compañeros, que como yo, evadieron llegar al final.

¿A que nadie siente envidia por no estar en la engalanada celebración del 50 Aniversario bla bla bla. Me imagino que nadie extrañe los voluntarios y fervientes desfiles cubanos :-)
Nos vemos

martes, 9 de diciembre de 2008

Dos logotipos: un mismo objetivo


Logotipo del Partido Comunista de Cuba (único partido legal en Cuba)


Logotipo del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)

Siguen las coincidencias entre mi pequeña isla y esta tierra de gigantes montañas. Esta vez he encontrado que el logotipo del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) es una copia del muy conocido en Cuba, Partido Comunista de Cuba (PCC). Para los que siguen dudando sobre hasta donde podría llegar el proyecto propuesto por Chávez, creo que está bien claro y definido.

Sin embargo, me mantengo como espectador. A veces me siento protagonista de lo que no viví en Cuba por mi edad o testigo de quien ve venir un tsunami y solo le queda advertir o persuadir de la gran ola que impactará hasta en la psicología de las personas dejándolos mutilados.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Anatomía de un polémico fenómeno

Les presento a la Libreta de Productos Alimenticios. Engendro “Revolucionario”

Los que la conocen recordarán lo que es un fin de mes en Cuba, cuando se ha agotado el 1 1/8 kilo de arroz, los 2 ¼ kilos de azúcar y el medio jabón de baño por persona.

Muchos agradecen los bajos precios a los que se venden productos alimenticios de mala calidad como la galleta de sal o el mal oliente picadillo de soya…

Otros recuerdan él único pan (¿de cada día?) que les corresponde a diario: Si te lo comes en la noche, no tienes para el desayuno. Muchos papás y mamás se sacrifican y se los dejaban a sus hijos.

Mes tras mes esperamos el jabón (de baño y de lavar), la crema dental, el detergente, la carne de res (que se desapareció en los años 80 y en cubano criollo les decíamos “novenas” porque llegaban cada nueve días, después, parece que se fue en una balsa y nunca más se le ha visto en las carnicerías de Cuba), el pollo, o la “dieta” por enfermedad, el tomate. Nos parecíamos a Penélope esperando por veinte años a su adorado Odiseo, con la diferencia que podía llegar después de morir, o nunca simplemente.

Observen cuantas casillas quedaron vacías mes tras mes. Además, el control que tienen sobre uno: saben nuestra edad, dirección, número de identidad. Si sales del país y no regresas, a los 11 meses y un día ya no tienes derecho a esos “beneficios sociales”.




Recuerdo cuando llegaba el picadillo de soya a la carnicería que esa noche el único olor que se sentía en el vecindario era el de la cocción de ese alimento en todas las casas.
En la parte oriental del país, comerse un huevo era un lujo (dos por personas al mes)
Productos como las almohadillas sanitarias (“íntimas” en Cuba), el algodón, el keroseno (luz brillante), el alcohol (de bodega) para encender los mecheros y cocinas, también son controlados por el “engendro socialista”. Pobres mujeres, no pueden pasarse de 10 almohadillas sanitarias durante su proceso menstrual. Y del papel sanitario (papel toilet)… ni pensarlo, nunca llega a la bodega. ¡¿Me preguntas que cómo resolvemos…?!

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Realidades Paralelas por Miriela González


"Adios esperanza" Imagen tomado por Rafael Ceiro, calle Carlos III (policlinico "Vang Troy"); La Habana, Cuba

Llevo casi un año en Venezuela, quién lo diría… Nunca pensé (realmente) que iba a vivir fuera de Cuba. Aunque esa es la posibilidad latente para todo cubano joven y no tan joven. En Cuba uno piensa que algo va a suceder, que va a mejorar la situación, que no va tener que acudir a esa opción para poder salir adelante.

El caso es que muchos traspasamos la puerta de embarque del aeropuerto y dejamos atrás tantas cosas: el abrazo de un padre y una madre tratando de contener las lágrimas mientras te dan ánimo para que no te vayas con esa sensación de abandono. Los demás familiares que acuden también tratan de extender al máximo esa despedida que dura desde que ya tienes la certeza que “te vas”, pues ya compraste un boleto para un día concreto, y no hay vuelta atrás.

Todos comienzan a verte desde ese momento con una gran tristeza como si se despidieran en vida. Lo cierto es, que en el caso de los cubanos, nunca se sabe cuando pueda ser el reencuentro, para muchos nunca llega.

Ya antes tuve que despedir a mi hermano, a mi esposo, mi cuñado, una amiga, y a otros ni siquiera tuve esa oportunidad, porque en Cuba, una salida se maneja como algo estrictamente confidencial. Cualquier cosa puede ser motivo de que “se caiga” el viaje, mucho más si es un viaje de trabajo del que pensamos “desertar”.

Así muchos toman el avión sin ni siquiera tener el derecho a despedirse por todo el tiempo que estarán ausentes, sino que se despiden por “unos días o meses” y nuca más los vuelves a ver.

En Cuba el exilio sigue siendo la única salida viable. Me alegra mucho saber que existen personas, que desde la isla, publican valientemente sus ideas, con las inmensas posibilidades que ofrece la blogosfera. No obstante, lo real es que son más conocidos fuera del país que allí mismo. Hasta que esa realidad no cambie poco se podrá hacer.

Posiblemente, a mi vecino por 30 años, Carlos, presidente del “comité” de mi edificio, le importe poco que la gente tenga que irse del país para llevar una vida más digna o que exista una joven cubana que tiene uno de los blogs más importantes y premiados de iberoamérica.

Para él, continúa la rutina de cobrar el “CDR” (Comité de Defensa de la Revolución), dar sus buenas o malas referencias (según le de la gana) cuando vayan a “veririficar” a alguien para poder trabajar en un lugar importante. Porque para Carlos, como para muchos otros, todo sigue igual.

jueves, 13 de noviembre de 2008

“Sin patria pero sin amo”


"Nostalgia". Imagen tomada por Rafael Ceiro, Macuto, Venezuela

Esas palabras dichas por José Martí hace más de un siglo no pierden vigencia, más, en la situación de penuria que vive la isla, ya no solo azotada por un gobierno autoritario, sino hasta por los embates de la naturaleza. Muchos cubanos andan por el mundo en busca de sus sueños, como mismo lo hizo el héroe de la emancipación cubana.

Los cubanos que vivimos exiliados, a quienes el gobierno de Cuba llama inmigrantes económicos, tratamos de adaptarnos a la patria que nos acogió -muchas veces por puro azar- vivimos en lugares que ni sabíamos que existían en este planeta. Al igual que Martí, estamos llenos de ambiciones liberadoras y nos vemos regresando a una Cuba libre, ya sea para una visita, para quedarnos allí o disfrutar de los derechos que nos arrebataron por mucho tiempo.

El inmigrante cubano se adapta a su nueva situación pero llega a sentir que el lugar donde está nunca es de él, a pesar de que lo defienda y contribuya con todas sus fuerzas a cambiar lo que le rodea. Pero es que va mucho más allá, y en su afán de volar siente que el cielo completo le pertenece. Lleva bien adentro de donde salió pero se le pierde la vista en lo infinito.

Decidimos andar un camino. Un camino de desarraigo, ya no somos ni de un lugar ni de otro, nuestros gustos han cambiado, maduramos bajo la sombra de una realidad que nadie te cuenta antes de dar el paso. Vivimos en cualquier parte de este mundo, no tenemos patria pero tampoco tenemos amos.

domingo, 12 de octubre de 2008

¿Será Venezuela otra Cuba?


Imagen tomada en la ciudad Baracoa, Cuba, por la periodista Johanna Infante

Hace unos días mi amigo Carlos me hizo esta pregunta y no pude evitar caer en la comparación al reconocer el entorno actual, que ya no es el mismo que el de hace cinco décadas, -solo dos ejemplos: tómense en cuenta los avances científico-técnicos, fundamentalmente en las comunicaciones, y que el entorno político actual de Latinoamérica ya no es de movimientos guerrilleros, ni mucho menos el de soportar dictaduras.

Me detengo en las circunstancias cubanas cuando Fidel Castro llega al poder, luego de vencer una férrea dictadura, con un nuevo proyecto social nunca antes vivido en Latinoamérica, aunque al cabo del tiempo demostró su falta de viabilidad y terminó en una dictadura moderna, con capacidad de adaptación para cada momento histórico.

Al analizar la historia de Cuba de los últimos 50 años es claramente visible la gradualidad del proceso dictatorial. Todo no vino de una vez. Fue un proceso pensado con sangre fría midiendo cada paso y utilizando todas las artimañas posibles para mantener confundido y divido al pueblo.

El cubano vio descomponerse su sociedad, donde sus hombres al igual que en cualquier país de Latinoamérica habían dado la vida en el campo de batalla en otro siglo. Y es que los nuevos dictadores se ocultan tras una falsa democracia, que a veces les dilata ejercer el poder de forma despiadada. Por eso demoran tanto tiempo en reconocerse como tales.

Cuando me hablan de la similitud política entre Cuba y Venezuela y me dicen que las condiciones sociales no son las mismas, lo acepto, pero doy el beneficio de la duda ante la gradualidad que imponen los procesos sociales. Mire a su alrededor y observe cuántas cosas han cambiado en relación con diez años atrás y quizás hayan sucedido sin notarlas usted, amigo Carlos.

Pero si aún cualquier persona tiene dudas, le invito a reconocer algunos aspectos que creí solo pasaban en Cuba:

Con mucha frecuencia el Presidente de la República expone largos discursos antiimperialistas por todas las emisoras de radio y televisión nacionales.

Un enemigo vitalicio, antagonista, culpable de todo lo malo que le sucede al país y su gente: Estados Unidos.

Un solo partido político omnipresente en todas las decisiones desde el más bajo, hasta el más alto nivel.

Palabras comunes como, “Poder Popular”, “batalla”, “marxismo”, “Lenin”, "burguesía".

Un aliado: Rusia.

Expropiación de tierras y bienes pertenecientes a una supuesta clase social burguesa y explotadora.

Los Comités de Defensa de la Revolución: nada más parecido a lo que conocemos por Concejos Comunales.

Culto a la personalidad. En la mayoría de las oficinas estatales uno se puede encontrar un cuadro de Fidel, el Ché o Raúl.

Celebración de fechas políticas, incluso por encima de las tradicionalmente religiosas.

Nueva interpretación de la historia y sus héroes.

Regulación de productos alimenticios. Las bodegas cubanas de los años 80: nada más parecido a un Mercal venezolano.

Regalías estatales: El gobierno de Cuba regalaba a países como Nicaragua, Angola, El Salvador, Haití lo que a su vez le regalaba la antigua Unión Soviética.

El gobierno cubano siempre está esperando una guerra, se encuentra inmerso en una batalla, o en un conflicto internacional.

Una consigna: “Patria, socialismo o muerte”


Por lo tanto, a pesar de vivir diferentes realidades históricas y sociales, Venezuela quizás no sea otra Cuba pero va por un rumbo muy parecido.